Por medio de la Ley 14/2013, de 27 de septiembre, de apoyo a los emprendedores y su internacionalización (en adelante, Ley 14/2013), de cuya medida fiscal más novedosa (el nuevo régimen de caja en el IVA) dimos cuenta en nuestra Circular 08/2013, se crean o modifican determinados incentivos fiscales en el Impuesto sobre Sociedades (IS) y en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Por lo que respecta al IS: (i) se crea una nueva deducción por inversión de beneficios (tanto ordinarios como extraordinarios); (ii) se flexibiliza, si bien con peaje, la aplicación de la deducción por investigación (I), desarrollo (D) e innovación tecnológica (it); (iii) se modifica la reducción de las rentas procedentes de determinados activos intangibles; y (iv) se mejora la deducción por contratación de trabajadores discapacitados.
En cuanto al IRPF, cabe destacar la nueva regulación de los incentivos fiscales para inversiones en empresas de nueva o reciente creación.